COVID, DELTA, ÓMICRON, DELTACRON, ¿QUE SIGUE?
Por Juan Enrique Sánchez Galván
Ante la creciente ola de contagios por el virus del SARS-COVID 19, la aparición de nuevas variantes, y el relajamiento de las medidas sanitarias, la pregunta que todos nos hacemos es: ¿Qué sigue?
Después de una baja en los casos positivos y, por ende, en las hospitalizaciones y muertes, la población, no solo de México, sino del mundo entero, comenzó a relajar los cuidados y las medidas de sanidad, las cuales habían sido impuestas como medida principal para contener el avance de la pandemia.
El estudio del virus, derivó en la elaboración de varios tipos de vacunas y medicamentos, los cuales han sido la apuesta para intentar acabar con la enfermedad, y generar el ingreso a la llamada “nueva normalidad”. En todos y cada uno de los países del mundo (en menor o mayor medida), la vacunación ha sido el arma principal en la batalla por la salud de la población. La humanidad ha tenido que aprender a convivir con el virus, a sortear los contagios, y a vivir su día a día de una manera diferente a como lo hacía hasta antes del inicio de la pandemia.
Sin embargo, como suele suceder con este tipo de enfermedades, el virus ha mutado en diversas variantes, que han puesto en jaque a la comunidad médica y científica del mundo entero, quienes han tenido que buscar la manera de que los medicamentos y vacunas existentes, ayuden contra estas nuevas variantes. Hablando de la más reciente variante, la denominada Ómicron, sabemos que es de más rápida propagación y contagio, aunque las evidencias han dejado ver que la tasa de hospitalizaciones, enfermedad grave y defunciones, es muy baja.
Esto hace que la comunidad internacional tenga la esperanza de encontrarse ante el inicio del fin de la pandemia, pues cada variante que surge tiene una letalidad cada vez menor, aunado a que los avances en las vacunas y los medicamentos para el tratamiento de la enfermedad, los cuales muestran cada vez mayor eficacia al proteger a la gente del modo grave de infección.
La recomendación sigue siendo el lavado de manos, la sana distancia y el uso de cubrebocas, así como tener completo el esquema de vacunación para dicha enfermedad.
Y ante cualquier síntoma, lo preferible será el aislamiento y confinamiento para evitar contagiar a más personas.
Esperamos, de todo corazón, que este año se el del fin de la pandemia. Ayudemos a que así sea.