María Fernanda Sánchez y Carlos Tomás Aranda, mexicanos desaparecidos en el extranjero
Por Omar Sánchez
El sábado 5 de agosto, una noticia estremeció las redes sociales: la joven mexicana María Fernanda Sánchez, fue encontrada muerta en Alemania, un país con un bajo índice de personas desaparecidas y mujeres fallecidas por causas no naturales. La desaparición de una mujer extranjera en territorio teutón sacudió a la nación europea, debido a que, después de su reunificación, Alemania se ha caracterizado por ser uno de los países que mayores garantías de seguridad brindan a las mujeres, ya sean locales o visitantes. Las cifras no mienten: de cada 100 casos de mujeres desaparecidas, más de la mitad son encontradas en el lapso de una semana, y el resto de los casos son esclarecidos en un mes como máximo.
Al momento de su desaparición, María Fernanda tenía 24 años de edad, y se encontraba en la ciudad de Berlín, estudiando un posgrado en nuevos medios digitales. La joven mexicana concluyo sus estudios profesionales en el año 2021, donde se tituló como Licenciada en Comunicación y Medios Digitales, en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), una de las instituciones de educación superior privada más prestigiadas de México. María Fernanda desapareció el día 23 de julio en circunstancias aún no esclarecidas, en su departamento, ubicado en la capital alemana.
Cuando una persona adulta desaparece en Alemania y sus familiares o amigos realizan la denuncia, la policía comienza una exhaustiva búsqueda, utilizando todos los medios humanos y tecnológicos a su alcance. Tan pronto como la persona es hallada, las autoridades le preguntan si desea que su familia o amigos conozcan su paradero. Si la persona es mayor de edad y se demuestra que sus facultades mentales se encuentran funcionando adecuadamente, y manifiesta que se ausentó por decisión propia, podrá mantener su nuevo lugar de residencia en secreto, y lo único que podrán hacer las autoridades será informar a sus seres queridos que fue encontrada a salvo, y el caso será cerrado.
En Alemania es posible denunciar la desaparición de una persona en cualquiera de las estaciones de policía locales del país. Una vez que se da la orden de búsqueda, en la misma participan todas las fuerzas policiales disponibles, así como bomberos y fuerzas especiales, las cuales utilizan perros de búsqueda entrenados para dicha tarea. Incluso, pueden desplegar helicópteros con equipo altamente especializado, incluyendo cámaras térmicas y equipo de visión nocturna, lo cual aumenta significativamente su probabilidad de éxito. Estas búsquedas regularmente se resuelven de forma favorable y las personas desaparecidas o ausentes son encontradas a salvo.
Lamentablemente, el caso de María Fernanda es uno de los pocos que no se resolvieron de manera exitosa. Sus familiares fueron informados de su deceso, y las autoridades teutonas afirmaron que el caso sería investigado a fondo, utilizando todos los recursos humanos y materiales, para ofrecerles una explicación creíble y muy sólida acerca de las causas que motivaron su desaparición. Al conocerse esta situación, el gobierno mexicano solicitó de manera formal el esclarecimiento de este caso. Es digno de mencionar que, desde el primer día en que se dio a conocer este caso, los reporteros que acuden diariamente a la conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador le hacían constantes preguntas acerca del papel que estaba realizando su administración para encontrar a María Fernanda.
Después de muchos esfuerzos de las autoridades alemanas, el cuerpo sin vida de la estudiante mexicana fue encontrado flotando en un canal de agua. Así lo informó la canciller mexicana Alicia Bárcena, quien de inmediato se lo hizo saber al presidente de México. El gobierno alemán ha hecho público su compromiso para lograr el esclarecimiento de este lamentable caso. Además, afirman que pronto tendrán noticias en las cuales darán a conocer cómo sucedió exactamente este triste deceso. De la misma forma, las autoridades de esa nación hicieron público su compromiso en castigar a los responsables, si las investigaciones demuestran que se trató de un feminicidio.
Al caso de María Fernanda hay que sumar uno más: este corresponde al ciudadano mexicano Carlos Tomás Aranda, desaparecido en Canadá, en la Columbia Británica, el 7 de julio. El joven actualmente tiene 30 años de edad y se encontraba en la provincia de Osoyoos, específicamente en un granja en la cual buscaba obtener mayor experiencia en torno a su carrera universitaria.
Según declaraciones realizadas por un amigo de Carlos Tomás, la noche del 6 de julio, ellos se reunieron con dos hombres más. El amigo, de nombre Ángel, relató que él se despidió y se retiró a dormir y Carlos se quedó con los dos hombres, identificados como Antonio y Omar. También relató que todos se conocieron en territorio canadiense. De inmediato las autoridades contactaron a los dos hombres, quienes también son mexicanos, y al entrevistarlos, negaron que ellos tuvieran responsabilidad alguna en la desaparición de Carlos, quien ya llevaba un mes en la granja, trabajando de manera regular.
La Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL) emitió una ficha de búsqueda a nivel internacional para agilizar su localización. Sin embargo, los padres del joven mexicano afirman que no han recibido el apoyo necesario por parte de las autoridades federales de nuestro país. Por ello, durante la mañana del jueves 3 de agosto, familiares y amigos de Carlos realizaron una manifestación en las inmediaciones de Palacio Nacional en la Ciudad de México, para exigir mayor apoyo del gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, ya que afirman que no se han realizado las acciones suficientes para la localización del joven mexicano. Además, los padres de Carlos acusaron discriminación, pues consideran que por ser habitantes de Oaxaca, no han recibido el mismo trato que las autoridades federales brindaron a la familia de María Fernanda en Alemania.
La policía canadiense ha realizado una exhaustiva búsqueda en la cual participan policías, voluntarios, binomios caninos e incluso drones, pero hasta el momento no se tienen noticias de Carlos Tomas, y sus seres queridos se encuentran desesperados por esa situación. El gobierno canadiense se comprometió a redoblar esfuerzos para lograr la localización del joven originario de Oaxaca, y al mismo tiempo, la embajada de México en Canadá realizó “un atento llamado a la comunidad” para que apoyen en la búsqueda de Carlos.
En días recientes, Octavio Aranda, padre de Carlos, viajó a Canadá, donde se ha unido a la búsqueda de su hijo. «Estoy cayendo en una desesperación muy triste porque no veo a mi hijo, no lo encuentro, no hay apoyo tanto acá de la gente ni de las autoridades, no hay. Voy a agradecer de corazón que me avisen si ve a mi hijo. Si saben algo de él, no dude en avisarme. O si tienen alguna información de dónde pudo irse o si lo vieron tirado en alguna parte» dijo visiblemente consternado el señor Octavio Aranda. La familia de Carlos ha manifestado que han recibido llamadas de extorsión, en la cuales afirman que el joven se encuentra secuestrado, aunque las autoridades no han podido verificar la autenticidad de las mismas. El tiempo sigue avanzando y cada día las probabilidades de encontrar con vida al joven Carlos Tomás Aranda se van diluyendo.
María Fernanda Sánchez y Carlos Tomás Aranda: dos mexicanos perdidos a cientos de kilómetros de su país de origen, un país, México, que lamentablemente acumula miles de desapariciones en su territorio. Un país, el nuestro, en el cual las noticias de personas ausentes llenan las planas de los periódicos y los noticieros diariamente. Un país al que llamamos Patria, misma que se ha convertido, tristemente, en una gran fosa común.