“LA SUMA DE LOS DÍAS”

Por José Luis Mecatl

(2007)

ISABEL ALLENDE

(Chilena, nacida en Perú en 1942)

Isabel Allende nació en Lima, Perú, en 1942, de padres chilenos; salió de su país en 1973, después del golpe militar perpetrado por Augusto Pinochet en contra del presidente Salvador Allende, su tío, instalándose en Venezuela, donde inició su carrera como escritora, siendo su primera obra, y quizá la más importante hasta ahora, “La casa de los espíritus”, obra que fue llevada al cine con el mismo nombre, teniendo un reparto de lujo: Meryl Streep, Glenn Close, Jeremy Irons, Wynona Ryder, Antonio Banderas y Vanessa Redgrave; Isabel Allende es considerada como la autora viva en español con mayores ventas de libros en el mundo; con una obra abundante, ha explorado diferentes géneros literarios y ha sido traducida a más de 40 idiomas.

En “La suma de los días”, la autora nos sumerge en los vaivenes de toda una etapa de su propia vida familiar, tanto que queda la duda de si hay algo esencial que todavía haya dejado en el tintero. En un diálogo “espiritual” con su hija Paula, porque aunque ella ya no se encuentra presente en este mundo, se constituye en presencia perenne ante su madre, lo que  le permite ser interlocutora única a lo largo del libro, a través del cual le va compartiendo altibajos de su trayectoria personal y múltiples particularidades que surgen en su relación con los demás miembros de la familia que, por cierto, resulta ser muy amplia, en una idea más cercana y compartida con el concepto mexicano, de los hijos y sus descendencias girando en torno a los abuelos (Isabel y su esposo, Willie), cuya casa se convierte en el lugar de reunión por antonomasia.

Inicia el relato de Isabel a su hija, con una experiencia llena de emotividad que tiene lugar en diciembre de 2006; reunida prácticamente toda la familia, se han organizado para estar presentes en una zona boscosa en California, Estados Unidos, lugar donde la autora tiene su residencia, con el objetivo de esparcir las cenizas de Paula, quien falleció debido a complicaciones y malos cuidados derivados de un mal conocido como porfiria.

Al ir poniendo al día a Paula acerca de las vicisitudes familiares, la autora también nos comparte detalles de su relación con Willie, su segundo esposo; de las experiencias del matrimonio con los hijos de ambos; nos habla de Jennifer, hija del primer matrimonio de Willie, una joven muy afectada por su adicción a las drogas, viviendo en situación de calle y visitante frecuente de los hospitales, quien inesperadamente resulta embarazada, dando a luz a una pequeña con muy malos pronósticos de vida; sabemos también acerca de Nico, el otro hijo de Isabel, hermano de Paula, del desastre que se le viene encima porque Celia, su esposa, a quien realmente ama, descubre que es lesbiana.

Estos y muchos otros episodios que involucran a los distintos integrantes de la extensa familia que resulta ser la de Isabel, la autora del libro, van siendo presentados a lo largo de una novela de lectura ligera, cuyas historias nos resultan cercanas, porque son historias de personas reales, de hombres y mujeres, jóvenes y viejos, de carne y hueso, con nombres y apellidos, también reales, lo que nos lleva, en mayor o menor medida a sentirnos identificados con ellos, con sus penas, sus angustias, pero también con sus alegrías; en fin, con sus emociones y sus sentimientos.

¿Quieres saber qué rumbo toma la historia de cada uno de los familiares de Isabel?

¡Aventúrate en la lectura del libro!

¡Te invito a leer!

José Luis Mecatl Morales

12 de julio, 2022