Javier Milei, la interminable crisis económica en Argentina y el avance de la ultraderecha
Por Omar Sánchez
En el cono sur del continente americano se encuentra la República Argentina, una nación que cuenta con una gran riqueza geográfica, que va desde las montañas de los Andes, en el oeste, hasta las vastas llanuras de la Pampa, en el centro. Tiene diversos climas e increíbles paisajes que son un atractivo turístico para muchos visitantes. Es conocida en todo el mundo por dos razones: la primera, su pasión desenfrenada por el futbol. Miles de imágenes se han replicado infinitamente en medios escritos y electrónicos: “la mano de Dios” de Diego Armando Maradona durante el mundial de México 86, la violencia desatada por sus tristemente famosas barras bravas y el último campeonato mundial de futbol, ganado por una selección encabezada por Lionel Messi en la justa de Qatar 2022. La segunda razón que ha colocado a los argentinos en los principales noticieros del orbe, es la difícil situación económica que viven desde hace varias décadas, la cual ha golpeado severamente los bolsillos de la población en general. El descontento social es una de las características que identifican a la población del país sudamericano, y que constantemente los obliga a la movilización callejera, donde expresan su enojo en contra de los gobernantes que dirigen el rumbo de su país.
Argentina ha padecido muchas crisis económicas y estas han reducido notablemente la calidad de vida de sus habitantes. Algunas de las crisis más importantes son: La crisis de la deuda y la hiperinflación. Esta sucedió en la década de 1989-1999, durante el gobierno de Carlos Saúl Menem. En este periodo, el peso argentino sufrió una devaluación del dos mil por ciento, la deuda externa creció y las acusaciones de corrupción minaron su popularidad hacia el final de su gobierno. La segunda etapa es considerada por diversos especialistas como la peor crisis económica en la historia de Argentina. El presidente Fernando de la Rúa tomó diversas decisiones radicales, entre las que destaca el llamado “corralito financiero”, que consistía en establecer un límite semanal de dinero que cada persona podía retirar de los bancos. Esto generó severas protestas, bloqueos de calles y saqueos que obligaron a la renuncia de Fernando de la Rúa. El tercer momento se dio durante el mandato de Cristina Fernández de Kirchner, periodo comprendido entre los años 2007 -2015. Ella fue la primera mujer en asumir el cargo de presidenta en Argentina. En esta etapa creció la inflación y se le acusó de ocultar los datos reales de una mala economía, la deuda externa creció y las acusaciones de corrupción generaron tensiones políticas. Nuevamente la población protestó en las calles.
Actualmente, Argentina se encuentra gobernada por Alberto Fernández desde el año 2019. Su periodo concluye el 10 de diciembre de 2023, y no presentó candidatura para reelegirse en el cargo. Durante un acto político dijo lo siguiente: «Yo he decidido terminar mi mandato el 10 de diciembre, hay muchos problemas en Argentina y no puedo estar abocado a una campaña, tengo que estar abocado a resolver los problemas que tengo en Argentina, que son los problemas de ustedes». También agregó “Sólo tengo una responsabilidad política, mi primera responsabilidad es que Argentina pueda crecer, pueda avanzar, que los argentinos encuentren trabajo. Se que la inflación es un problema y hay que combatirla. Y para hacer eso, no puedo ser candidato, tengo que ser presidente, tengo que dedicar todo mi tiempo a eso». Hay que señalar que durante su mandato el peso argentino ha sufrido una devaluación del 85 por ciento. Para entender adecuadamente la mala situación financiera en argentina podemos señalar que actualmente un peso mexicano equivale a veinte pesos argentinos.
La población de Argentina se encuentra en una espiral interminable de problemas económicos, y esto ha mermado la credibilidad de los gobernantes que se autodenominan como “políticos de izquierda”. Bajo esta premisa, el día 13 de agosto sucedieron las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Estas son unas votaciones que determinan cuáles serán las candidaturas que se presentarán para las elecciones presidenciales y legislativas el 22 de octubre de 2023. Al conocer los resultados, gran parte de los políticos argentinos y latinoamericanos palidecieron, pues un nombre inesperado logró obtener el mayor número de votos: Javier Milei, un economista de 52 años, propuesto por el partido La Libertad Avanza, quien con el 30 por ciento de los sufragios emitidos, logró superar a las dos grandes fuerzas políticas que han detentado el poder en Argentina durante las dos últimas décadas.
Pero, ¿Cuál es la preocupación que representa Javier Milei para tantos políticos? Este hombre se autodenomina como un “liberal libertario”. Según la Universidad de Barcelona «Los libertarios mantienen los valores liberales clásicos: individualismo, libertad económica y defensa del mercado, como mejor orden para la asignación de recursos y la concepción de Estado policía». Bajo el lema «No vine a guiar corderos, vine a despertar leones”, Milei ha logrado el apoyo de algunos políticos y empresarios que buscan una nueva dolarización de la economía. También pretende privatizar las empresas públicas del Estado y “dinamitar” (sic) el Banco Central. También es partidario de la compraventa de armas y busca regularizar la venta de órganos humanos. Milei es un opositor al aborto y a la educación de género, y rechaza que los docentes enseñen temas de identidad sexual en los colegios públicos de Argentina.
Este personaje pretende realizar un radical recorte al gasto y la asistencia social que reciben los argentinos. En los últimos días apareció en un video donde se aprecia gesticulando de manera exagerada y arrancando de un pizarrón el nombre de diversos ministerios presidenciales. Esto, según él, porque son inútiles. Su propuesta busca dejar en funcionamiento solo ocho de los dieciocho que actualmente existen en la nación pampera. Los ministerios que pretende desaparecer son los siguientes: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible; Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación; Ministerio de Cultura, Ministerio de Desarrollo Social; Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat; Ministerio de Educación, Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad; Ministerio de Salud; Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social; Ministerio de Transporte, y por último, el Ministerio de Turismo y Deportes. También pretende retirar los subsidios gubernamentales, para que los ciudadanos paguen las tarifas reales a las empresas que otorgan servicios de luz, agua potable, etc.
La economía argentina ya se vio afectada por estas propuestas y por el posible triunfo de Milei para convertirse en presidente. Cuando se dieron a conocer los datos oficiales y el número de votos que obtuvo en las elecciones primarias, el peso argentino sufrió una devaluación del veinte por ciento, generando incertidumbre financiera y un descontento social generalizado entre la población. Las fuerzas armadas y policías argentinas son otro de los temas que abandera Milei en sus propuestas, pues según él, pretende «devolverles el apoyo político a las fuerzas de seguridad, para que vuelvan a cumplir su función, que es reprimir el delito para proteger la vida, libertad y propiedad de los individuos», ante estas declaraciones y su posible triunfo, se prevé una vuelta al autoritarismo y represión en el país sudamericano. Milei ha recibido el apoyo del partido ultraderechista español VOX, y también ha sido comparado con Donald Trump, no solo por el estilo de su cabello, sino por el desprecio a las clases populares. Diversos analistas y académicos han mostrado públicamente el rechazo a sus propuestas, pues consideran que representan un grave retroceso en materia de derechos humanos y libertades individuales. La hora de la verdad se acerca, y una sombra oscura acecha a los argentinos, un pueblo que históricamente ha buscado subsanar sus carencias económicas con sus triunfos futbolísticos. El ultraconservadurismo avanza a paso firme sobre Argentina y seguramente una nueva crisis económica llegará.